El 29 de agosto, en la octava ronda de la serie VLN que se celebra en el circuito alemán de Nürburgring, Kazunori Yamauchi, productor de la serie "Gran Turismo®", alcanzó la victoria en la clase SP8 (en un Lexus IS F, en la categoría de motores "similares al modelo de producción"). Antes de esta prueba, Yamauchi solo había disputado dos carreras de coches normales. Esta era su primera competición internacional en un coche de carreras y la primera vez que pilotaba en Nürburgring. Así, su victoria demuestra que el entrenamiento en Gran Turismo® es realmente efectivo.

La carrera VLN es una competición de turismos que se celebra más de 10 veces al año en el circuito de Nürburgring. Al volante del mismo coche de Yamauchi, y conformando su equipo, se contaban Peter Lyon, periodista del motor, y Hideshi Matsuda, piloto profesional. Los tres son miembros del jurado de los premios “Coche Mundial del Año" (World Car of the Year o WCOTY), y este proyecto de competición se planteó como el equipo de los jueces.
El coche era el Lexus IS F que completó las 24 horas de Nürburgring de este año. Es prácticamente como el modelo de serie, salvo por los aditamentos mínimos de seguridad que se exigen, como la jaula antivuelco.

La carrera no fue precisamente correr y cantar. En los entrenamientos del día anterior, el parachoques de un BMW Z4 que corría frente a ellos se cayó, estrellándose contra el parabrisas del IS F. Yamauchi no pudo completar una sola vuelta ese día, pues tuvo que abandonar el circuito.
Incluso durante la tanda de clasificación que se celebró la misma mañana de la carrera, Yamauchi solo tuvo la oportunidad de dar una única vuelta. Sin embargo, confiando en la experiencia adquirida tras las más de 1.000 vueltas virtuales que ha realizado, se lanzó a por todas, obteniendo un tiempo de vuelta solo 7 segundos superior al de Hideshi Matsuda, un piloto veterano que hasta tiene experiencia compitiendo en Le Mans.

En la carrera de resistencia de 4 horas, cada piloto debía conducir durante 7 vueltas, y el cambio de piloto se realizaba a cada repostaje. Cuando Yamauchi fue a comenzar sus vueltas, el equipo descubrió que el BMW M3 que lideraba la carrera dentro de su clase estaba perdiendo ritmo por problemas mecánicos. Así, debió perseverar incluso bajo la presión de una posible victoria de clase y se puso al volante, aumentando su ritmo con cautela.
En la última vuelta de su turno de pilotaje, registró un tiempo de vuelta de 10 minutos, 9 segundos. Esa fue la vuelta rápida del equipo y rebaja en 1 minuto el mejor tiempo registrado por ese mismo coche cuando tomó parte en las 24 horas de Nürburgring en mayo de este año. Los esfuerzos conjuntos de Yamauchi y de los otros dos pilotos llegaron a buen puerto, y el equipo alcanzó el mejor resultado que cabía esperar.

Cuando le preguntaron por qué había competido en este evento, Yamauchi afirmó que "Quería confirmar cuán efectiva es la experiencia en el mundo virtual, compitiendo en una carrera en Nürburgring. Y eso no solo incluye los aspectos del pilotaje, sino una larga serie de factores entre los que se encuentran el montaje del coche, la comunicación y otros muchos. Y, por supuesto, todo esto se transmitirá en las futuras versiones de Gran Turismo®.